Día de Latinoamérica: el “valor agregado ambiental” tiene su precio
Entre los empresarios alemanes con intereses en América Latina no han pasado inadvertidas las afortunadas coincidencias que elevaron el perfil de Hamburgo este año como puente para el intercambio de conocimientos en materia ecológica, para las inversiones en el subcontinente y para la transferencia de tecnologías que permiten generar energías limpias. De ahí que el Día de Latinoamérica, el evento anual más importante de la asociación que los agrupa, se haya celebrado este lunes (17.10.2011) en la ciudad hanseática con conferencias enfocadas hacia temas como el desarrollo económico sustentable y las políticas ambientales y energéticas.
Y, en enero de 2011, los Estados de la Unión Europea, Latinoamérica y el mar de las Antillas decidieron que la Fundación Unión Europea-América Latina y Caribe (UE-ALC) tendría su sede en Hamburgo y no en París o en Milán, que compitieron con la ciudad portuaria por acogerla. “Hamburgo, por su estrecho contacto con América Latina, es el lugar óptimo para la nueva fundación”, declaró en su momento el ministro alemán de Exteriores, Guido Westerwelle, subrayando que la entidad en cuestión era un aspecto clave del Plan Alemania-Latinoamérica presentado por su cartera en agosto de 2010 en Berlín.
Alemania, México y sus megaciudades
La red internacional cities for mobility coordina proyectos en ochenta países para optimizar la movilidad en 300 ciudades, entendiendo el término movilidad como una noción que va más allá de la logística urbana y el tráfico cotidiano; los promotores de cities for mobility se han esmerado en demostrar que el consumo energético, la protección del ambiente, la seguridad personal, la salud pública, la economía local y el turismo están estrechamente ligados al tema de la movilidad. “Esa organización llamó mi atención porque Ciudad de México tiene enormes problemas de movilidad y un gran deseo de resolverlos”, comentó Delgado.
Montevideo corteja a Berlín
Mientras la conferencia en la que participó la Secretaria del Medio Ambiente de Ciudad de México puso su acento sobre los retos ecológicos de las grandes ciudades, aquella en la que predominaron los representantes del Gobierno uruguayo giró en torno al tema de las inversiones y la cooperación tecnológica. Una elección comprensible, considerando que el presidente de Uruguay, José Mujica, siete de sus ministros y una comitiva de más o menos treinta empresarios se encuentran en Europa para hablar de negocios con la canciller Angela Merkel y las autoridades del bloque comunitario, también en nombre del Mercosur.
Kreimerman describió las líneas de cooperación propuestas por Montevideo a Berlín para estimular la inyección de capital extranjero a la economía uruguaya: “inversiones en la industria del conocimiento y otras que saquen provecho a los recursos naturales y a la estratégica ubicación geográfica de nuestro país; inversiones en la matriz energética nacional, que nuestro Gobierno busca diversificar, apelando a una mayor cantidad de fuentes de abastecimiento renovables; y una intensificación de las de por sí boyantes relaciones comerciales binacionales. Alemania es el séptimo comprador de productos uruguayos”, explicó el Ministro uruguayo de Industria.
El “valor agregado ambiental” tiene su precio
“Y esa ‘calidad ambiental’ debe ser premiada mediante los precios que los clientes más exigentes están dispuestos a pagar”, agregó Aguerre, enmarcando las ambiciones uruguayas en el contexto de los problemas globales más graves. “El mundo no sólo está atravesando una crisis financiera, sino también una crisis energética y una ambiental, las mediciones del calentamiento global así lo indican. Y queremos aprovechar nuestra visita a Alemania para promover nuestro sistema de producción como uno eficiente y responsable en términos ambientales, económicos y también sociales”, apuntó el ministro uruguayo.
El Día de Chile
“Otro punto importante en el programa del Día de Chile es analizar la posibilidad de cooperaciones para el desarrollo del sector energético chileno. Ese país tiene como reto solucionar sus problemas de abastecimiento energético, que se derivan de la falta de recursos naturales como gas, petróleo y otros combustibles fósiles. Eso le abre las puertas en Chile a las energías renovables, sobre todo a la eólica y a la solar”, añadió Schmitt.
Autor: Evan Romero-Castillo
Editor: Pablo Kummetz
Editor: Pablo Kummetz